Este blog es la segunda iteración de una serie de ensayos fotográficos que documentan las actividades en curso llevadas a cabo por las fuerzas locales en la región colombiana de Urabá con el propósito de preservar, nutrir y mejorar la cultura picotera local que se ha visto gravemente afectada por la violencia estructural y la represión del gobierno. Reconocer el valor social y pedagógico de la práctica cultural de los picós y ganarse el apoyo y el respeto de las autoridades locales es clave no solo para la supervivencia de la cultura sino también para el bienestar de las comunidades locales. SST se enorgullece de poder ofrecer una plataforma para ampliar este trabajo absolutamente relevante. Queremos expresar nuestro agradecimiento a los autores Miladis Córdoba Rivas y Alejandro Linares Martinez, y al colectivo Urabá Sound System y a nuestros colaboradores de El Gran Latido sound system (Bogotá) por su incansable esfuerzo en promover y preservar la cultura SST en Colombia.

Este blog también está disponible en inglés en este enlace

Por Miladis Córdoba Rivas y Alejandro Linares Martinez

Imágenes: Segundo Encuentro Picotero, Turbo, septiembre 2022, cortesía de Urabá Sound System

El Picó, pickup o sound system en Urabá ha sido el escenario de encuentro para la recreación, el arte, la cultura, la historia y la memoria para las juventudes de la región; en el que se reconoce al continente africano como el lugar de origen de los ritmos que allí suenan y que conectan con la ancestralidad.

Al ser un escenario particularmente autónomo, político, social, organizacional y sonoro; crea un ecosistema cultural del Picó [1] propio, sostenible, garantiza la circulación de sonoridades que pertenecen únicamente a su entorno, siendo esto armónico con la naturaleza de la cultura picotera/sound system en el que el papel de la competencia por mantener la mayor cantidad de discos exclusivos genera una producción musical masiva, como también la motivación de un público particularmente adepto a este nicho cultural; lo cual permite la circulación de artistas, productores, MCS y organizadores, que dinamizan las economías locales durante las sesiones.

El espacio picotero es también un lugar para el encuentro de diferentes generaciones y en el que se cuenta con la participación activa de familias, marcando con especial atención la participación de niños entre los 3 y 12 años de edad acompañados de sus padres quienes daban pautas de escucha y baile a sus hijos durante el desarrollo del mismo.

Pese a que en el Urabá la manifestación del conflicto armado interno fue particularmente aguda, el picó/sound system se ha mantenido como un escenario de encuentro de la juventud, siendo una manifestación cultural ancestral, en el que la música se mantiene a prueba de las balas que la rodeaban, Pero, al ser un escenario que no puede ser controlado por la dinámica de la colonización que encarna en algunas ocasiones el Estado, el pico/sound system ha sufrido procesos de marginalización, ilegalización, persecución.

Para los años 1990 y adelante, llegaron grandes oleadas de desplazados de Córdoba, Chocó y del mismo Urabá a los cascos urbanos de la región; municipios como Turbo, Apartadó, Carepa y Chigorodó concentran grandes cantidades de población víctima del conflicto. Son ellos, los hijos e hijas de las personas que encarnaron este proceso de despojo y violencia sistémica en la región, quienes sostienen la cultura soundsystem como un canal de resistencia al conflicto armado, un escenario de memoria sonora, de celebración de la corporeidad y de la rítmica africana.

Sin embargo, durante ese tiempo las sesiones picoteras también empezaron a detonar algunas violencias estructurales, que alejó la practica cultural picotera del dialogo social con una parte de la sociedad, que pese a haber participado activamente de espacios comunes en los encuentros picoteros entre los años 90 y parte del 2000, eligieron encarnar en su cotidianidad el racismo estructural, la carga emocional de generaciones en generaciones y los impactos y afectaciones heredadas en el marco del conflicto armado a lo largo y ancho de la historia.

Con el contexto anteriormente mencionado, los picos dejan de sonar, se crearon decretos prohibitorios que ordenaban el decomiso de la maquina picotera y del vehículo que lo transportaba; además, aplicaban, sanciones administrativas a los propietarios.

El ocho de Marzo de 2021, en una alianza institucional de la Fundación mi Sangre, FUNDASEVIDA, la Comisión de la Verdad, la Organización Internacional para las Migraciones OIM, El Gran Latido sound system y Guache, se realizó una sesión Picotera/sound system en torno a la conmemoración del día de los derechos de la mujer; espacio en el que se contó con la participando de las mujeres como protagonistas en distintos espacios.

La palabra se la tomaron las mujeres Bullerengueras, DJs, MCS, empresarias, lideresas y trabajadoras bananeras de Urabá; amplificadas por el Gran Latido sound system, quien llegó desde Bogotá para acompañarnos en el espacio: abriendo el camino para el disfrute de las sonoridades picoteras en la reactivación de sus máquinas, posicionando el espacio como el canal para la manifestación cultural, la  reconciliación y visibilización de estrategias comunes en búsqueda de acciones para la no repetición del conflicto armado en nuestros territorios.

Las peleas durante las sesiones han ido desapareciendo; cada vez son menos comunes los enfrentamientos que se daban entre las juventudes en el espacio picotero; puesto que tanto picoteros como asistentes al encuentro, han establecido unos acuerdos mínimos del cuidado del espacio para la sana convivencia en el que se establece como principio rector la reconciliación, intensificando el enfoque de  actividades de movilización social con la población LGBTIQ y las mujeres.

Un hecho a resaltar es la alta expectativa que se concibió en el marco de la campaña electoral a la presidencia, momentos en los que algunos picós ofrecieron sesiones gratuitas, en barrios de trabajadores bananeros, si ganaba las elecciones Gustavo Petro y Francia Márquez, puesto que consideraban que esta propuesta dialoga con con la cosmovisión y la creación valores comunes, como la paz y la convivencia y la memoria, en una región particularmente sumergida en la dinámica del conflicto armado interno en Colombia.

En esta sinergia se desarrolla el encuentro Picotero I, Urabá Soundsystem Sonando con Propósito durante julio de 2021. Este encuentro se desarrolló en la ciudad de Apartadó contando con la participación de 12 picos de la región y desarrollándose una actividad que logró el objetivo de demostrar que la cultura picotera/sound system no es el origen de los conflictos entre los jóvenes, que los enfrentamientos evidenciados corresponden a una manifestación de la violencia estructural que padece la región. Por el contrario, la cultura picotera/soundsystem ha salvado vidas, según dice ChuchoMan [2].

En el marco de la semana por la paz en 2022, las entidades que integran la Mesa de Reconciliación, Convivencia y Paz Urabá, Bajo Atrato – Darién [3]; preocupadas por el conflicto entre las juventudes, la estigmatización de jóvenes y sus espacios de encuentro como consecuencia de la violencia estructural generacional enraizada en la región de Urabá y la precarización de la cultura picotera, se propusieron adelantar una serie de actividades que motivaron la participación, el diálogo y la movilización social entre niños, niñas, adolescentes y jóvenes; y las instituciones encargadas de brindar protección y entornos protectores que dignifiquen la vida.

Reconociendo que lo que convoca hoy a las juventudes es el sonido, se propusieron espacios pedagógicos centrados en los sound system, las motivaciones que genera en la población que lo asiste y las dinámicas económicas que giran en torno al sonido. En este sentido, se llevaron a cabo varios encuentros de diálogo, en los que se conversó sobre una propuesta social del movimiento picotero para sonar con propósito en beneficio de las comunidades que habitan el territorio, de la necesidad de continuar promoviendo espacios de esparcimiento con las juventudes como lugares de sana convivencia y en ambiente familiar, la posibilidad de articular con las juntas de acción comunal la funcionalidad del picó y así,  poder incluir en la industria picotera a los jóvenes que se encuentran en procesos de resocialización, insistiendo en que se pueda lograr un real cambio social en la comunidad juvenil urabaense.

De la misma manera, se adelantaron diálogos con autoridades locales de Apartadó y Turbo, con el fin de explicar la intención de acompañar el proceso pedagógico que implica la comprensión del movimiento picotero y la intensión de sonar con propósito, estableciendo unos acuerdos mínimos entre autoridades locales, secretarios de gobierno, inspectores de policía, comandantes de policía y los dueños de los sound system.

Finalmente, se acordó la realización del Segundo Encuentro Picotero con una exhibición de máquinas el 25 de septiembre de 2022 en el estadio JJ Trelles del Distrito de Turbo, con el objetivo de promover un espacio pedagógico que promueve la Cultura Picotera como manifestación cultural, convirtiendo a este espacio de encuentro en el escenario de diálogo y movilización social para la construcción de acuerdos y consensos entre autoridades locales e institucionales, y el movimiento picotero de Urabá; en el que se estableció a la cultura picotera como patrimonio cultural de la región. Un evento para la promoción de la paz y la convivencia, en el marco de la Semana por la Paz “Juventud, Vida y Territorio”.

Monseñor Hugo Alberto Torres Marín, Obispo de la Diocesis de Apartadó, fue el encargado de aperturar el espacio, invitando a conocer la cultura picotera, disfrutar del espacio promoviendo la sana convivencia, la reconciliación, la paz y el diálogo, haciendo un énfasis a continuar en estos espacios con responsabilidad.

Inmediatamente después, se dio la bienvenida a cada uno de los Sound System con sus respectivos equipos de trabajo, contando con El Gran Conde, El Retacón, Masterali, El Bendecito Music, El Comando, El Gran Tiburón, Danger Music, Triple C, Fredy Music, Firu DJ, El Gran DJ, El Profesional, Búfalo Music, Dilanthony y el Aletoso; contando así con 15 máquinas para la exhibición.

Cada Sound System contó con media hora para realizar la presentación de su equipo de trabajo, una reseña de su máquina, la propuesta social para sonar con propósito y finalmente, escuchar sus mejores creaciones, exclusivos, cobas y placas.

Con este encuentro de manifestación cultural de la Cultura Picotera de Urabá, se abrió la conversación con el objetivo de configurar la cultura picotera como patrimonio de la región de Urabá, entendiéndolo como el espacio para el desarrollo de identidades propias del territorio, para el encuentro y el restablecimiento desde las raíces, la herencia, la memoria, el patrimonio y el legado ancestral.

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Referencias 

[1] Ecosistema Cultural del Picó, entendido desde el Colectivo Urabá Sound System Sonando con Propósito como la articulación de varios organismos que comparten la pasión por la sonoridad, los ritmos ancestrales que se producen en los espacios picoteros.

[2] Cantautor referente histórico de la región de Urabá y pionero en MC

[3] La Mesa de Reconciliación, Convivencia y Paz Urabá, Bajo Atrato – Darién, la conforman: Diocesis de Apartadó, Instituto Municipal de Cultura y Ciudadanía de Apartadó, Universidad de Antioquia, Instituto Kroc de la Universidad de Notre Dame, Jurisdicción Especial para la Paz, Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, Misión de Apoyo de la Organización de Estados Americanos, Organización Internacional para las Migraciones, Agencia de Renovación del Territorio, Universidad Luis Amigó, Corporación Cultural Camaleón de Urabá, Defensoría del Pueblo, Misión de Verificación de Naciones Unidas, ACNUR, Agencia de Reincorporación y Normalización, Campaña contra Minas, Unidad de Víctimas Urabá, Justicia Inclusiva USAID, CINEP, Pastoral Social, SENA.